Unas de las personas que, posiblemente, más se emocionan en una boda son la madre y las hermanas de la novia, ¿a que sí? Yo que soy de lágrima fácil, no me quiero imaginar la que montaré en la boda de mis hijas! Y la llantina que se cogió mi hermana pequeña en la boda de nuestra hermana mayor, fue antológica!!!
Pero bueno, vamos a la boda que hoy nos importa ;)
Pilar y Cristina llegaron a nuestro atelier a través de una amiga a la que le habíamos hecho el vestido de madrina.
Cristina tenía la idea clara del modelo que quería lucir en la boda de su hermana...
Vestido palabra de honor en mikado de seda en azul eléctrico con tul plumeti.
Un vestido elegantísimo, con aire años 40...
Y para el tocado eligió un plato en color gris con pasamanería, en el mismo tono que la capa que le hicimos para cuando refrescase al final del día.
Pilar, la madre de la novia, sabía que quería un traje de vestido y abrigo; y después de varias propuestas de telas muy diferentes, se decantó por una que nos tiene enamoradas!
Vestido en crudo y con flores estampadas en degradé en tonos rojos, con fajín combinado con la tela del abrigo.
Detalle del cierre del abrigo
Con la misma tela del abrigo, le confeccionamos la cartera que llevó, y en el mismo tono, le preparamos el
tocado buganvilla.
Y así de guapas y felices estaban en un día tan especial para ellas...
Además, uno de los días de prueba de sus vestidos, les acompañó la novia, que aún no tenía tocado para su boda. Nos contó más o menos la idea que tenía y el peinado que estaba terminando de definir et... voilà!
Un tocado joya para acompañar al recogido en tres ramas que llevaba.
¡Guapísimas!
Muchísimas gracias por haber confiado en nosotras para este día tan importante en vuestras vidas. Estamos muy contentas por haberos conocido porque sois encantadoras.